A los muy, pero que muy amantes de «La Guerra de la Galaxia» sí, sí, galaxia en singular (como bien explica Nacho Palou en Microsiervos), les hará gracia esta inocente frikada.
La pianista rusa Sonya Belousova (experta en adaptaciones al piano de clásicos televisivos) interpreta al piano los pasajes musicales más representativos de la primera trilogía que en realidad es la segunda (IV-V-VI) de la saga. Aunque también cuela alguna pieza como «Duel of the Fates» del episodio I. Piano decorado, pianista muy metida en su papel y escenografía al efecto. Repito, sólo para muy fans.
Curioso.
ACTUALIZACIÓN 01/01/2016. Pero si preferís el rock, no dejéis de echar un ojo a esta versión rockera. O esta otra, en un órgano 5/80 en Barrington. O simplemente, la original, dirigida por su creador John Williams.
Ya lo han visto casi 20 millones de personas en YouTube pero me resisto a que alguien se quede sin apreciar esta maravilla.
Para cantar no se necesitan los últimos avances tecnológicos con los que se pueden modificar cualquier instrumento o voz y hacer maravillas. Véase, por ejemplo, toda esa corriente de cantantes rimbombantemente apodados «electrolatinos» (Kiko Rivera inchuido) que lo único que saben hacer es enseñar cachas y canturrear tan mal cómo haríamos tú y yo en la ducha y luego ya le aplican todo tipo de sintetizadores, ecualizadores y de filtros para que por lo menos no den vergüenza ajena (algunos ni lo consiguen).
Y es que lo que la naturaleza no da, Salamanca no lo presta.
Para cantar lo único que se necesita es un buena voz. Y como muestra un botón. Adele, la cantante británica, se fue al Show de Jimmy Fallon y junto a la ayuda de un ukelele, un xilófono, una pandereta y varios «instumentos musicales» de última generación más comprados en el Carrefour cantó como los ángeles esta versión de «Hello«, el primer éxito de su nuevo trabajo. Eso sí, The Roots, un gran grupo de ¿rap/jazz? acompaña a la artista de Tottenham.
Aconsejo verlo a pantalla completa para apreciar «la complejidad» de los instrumentos utilizados. Para la voz de Adele, aunque apaguéis el monitor seguiréis oyendo su enorme chorro de voz.
ACTUALIZACIÓN 18/12/2015. Y otra vez lo ha vuelto a hacer. Coincidiendo con el estreno de la séptima entrega de Star Wars «El despertar de la fuerza» a capella y junto a los protagonistas de la película acompañados nuevamente por The Roots» interpretan un mix de la mítica saga.
El representante de James Rodríguez, jugador del Real Madrid, dándose cuenta que su representado está cuajando un gran inicio de temporada aprovecha el momento para intentar que el club le revise y le aumente el contrato al media punta.
Para ello, filtra a la ínclita directora de As Colombia, Sarah Castro Lizarazo, que James va a pedir un aumento de sueldo a Florentino. Dicha información se recoge en el diario deportivo el 15 de noviembre.
La noticia, que abrió la web durante parte del día, no tuvo la relevancia que Jorge Mendes (¿les suena…?) pretendía obtener para los intereses de su representado. Entonces, ni corto ni perezozo, hace aparecer de la nada a la prensa británica y al Manchester United, que curiosamente un día después quiere hacerse con los servicios del sudamericano.
Al día siguiente, y como no podía ser de otra manera, ya está reflejado en la prensa española aderezado con cuestiones colaterales (relación con Benitez, fichaje de de Gea…). El Real Madrid se empieza a poner nervioso y ¡bingo!
Al final, todo el mundo contento. El jugador, que por medio de las estratagemas de su apoderado, va a ver aumentada su ficha. El mismo representante, que se llevará un jugoso tanto por ciento de la operación y el diario que, en una semana sosa (deportivamente hablando) publica dos informaciones muy jugosas para los amantes del clic.
A los que no formamos parte del negocio se nos queda cara de tontos…
Seguro que @Wicho & Cía ya lo han publicado en su Microsiervos, pero no me resisto a que no esté en Chiquiworld. No sólo es un documento científico impresionante, también visualmente es un espectáculo muy bello.
El 11 de febrero de 2015 se cumplieron cinco años en el espacio del Solar Dynamics Observatory de la NASA, que proporciona imágenes increiblemente detalladas del sol. Este ingenio mecánico hace más de una fotografía por segundo durante las 24 horas de los 1826 días que se ha pasado cámara en ristre. Ha hecho aproximadamente unas 200 millones de imágenes (unos 2600 terabytes de datos).
Este vídeo es un resumen de los mejores momentos de estos cinco años. Los entendidos pueden apreciar un montón de aspectos técnicos que un observador novel como yo no logra apreciar. Lo que sí se puede sentir es el vértigo al pensar que esa «cosa» inerte, que sólo arde y escupe fuego es lo que nos permite vivir. Este tipo de cosas son las que te quitan las tonterías y te hacen ver lo pequeño que eres.
Muy recomendable, vamos, imprescindible verlo a pantalla completa.
Aunque no lo parezca, era muy pronto para ser un día no laborable (eso de las nueve de la mañana de un domingo). Además, hacía un frío del carajo a pesar del sol que asomaba tímidamente. La gente (nativos y turistas) se enfrentaba a las gélidas temperaturas como nosotros lo hacemos al sol abrasador: con naturalidad.
Ejemplo son las las sillas y mesas que se pueden ver en el vídeo en primer plano. Estaban vacías porque eran de una heladería que estaba abriendo en esos momentos y que todavía no estaba en marcha. Si no, estarían desayunando como campeones. Estos tres minutos están grabados en Rathausstrase en la Isla de los Museos (barrio de Mitte), uno de los puntos turísticos de la ciudad por antonomasia y a muy poca distancia de la no menos conocida Alexanderplatz.
Así pues, Berlín pasa a formar parte de las ciudades visitadas por Chiquiworld con una cámara en ristre. Se une así a París, Lisboa, Londres, Nueva York, Madrid, Roma, Kabul, Kyoto, Hong Kong y Pekín, como escala en esta vuelta al mundo virtual y visual.
Necesitaría comprar 20 o 30 camisetas de éstas para repartirla entre algun@s. Si alguien sabe dónde puedo comprarlas, les rogaría que me lo comunicaran en el teléfono que aparece en pantalla.
Esta foto, realizada por el danés Mad Nissen, y que recoge un momento íntimo de Jon y Alex, una pareja gai en la Rusia de Putin y su feroz represión hacia estos colectivos, ha sido la ganadora del premio World Press Photo de 2014.
Sin embargo, la foto premiada que más me ha impactado personalmente es la realizada por el chino Yongzhi Chu (imagen inferior). La cara de terror del mono que va a ser golpeado por su adiestrador en un circo chino de Suzhou no se puede describir con palabras.
Como todos los negocios tradicionales actualmente, está tienda de ultramarinos virtual está de capa caída. No tiene disponible todo el género que le gustaría, tampoco cuenta con tanto personal atendiendo como había en los buenos tiempos (que los hubo) ni tiene un horario de apertura tan amplios como puede tener un chino o un «supermercado de hipermercado».
A pesar de ello, algunos cosas siguen siendo iguales: la calidad de los género sigue siendo la misma, cada persona que entra por la puerta es única y merece un trato personalizado y aunque últimamente un poco desantendido, ponemos todo el corazón en cada producto que se expone en nuestras estanterías.
Pues eso, que cumplimos nueve añitos en este barrio virtual con las mismas ganas de siempre. Encantados y felices de la vida.
Por mucho que quieran poner de rodillas a París, ésta siempre se volverá a poner en pie. Y con más fuerza si cabe. Su mezcla de cúlturas, su historia majestuosa, su luz y color la hacen que sea, sino la primera, una de las capitales de Europa por antonomasia. Tenía pensado publicarlo un poco más tarde, pero no hay día mejor que hoy para enseñar la realidad diaria de una ciudad que ahora vive momentos difíciles. Sin más palabras. Sin más que añadir.
Así pues, París se suma a los ciudades que Chiquiworld ha visitado con una cámara en la mano. En este caso, los tres minutos fijos se rodaron una tarde de finales de octubre en la Rue de Seine, una de las calles primcipales del barrio de Saint Germain. Se une así a Lisboa, Londres, Nueva York, Madrid, Roma, Kabul, Kyoto, Hong Kong y Pekín, escalas en esta vuelta al mundo virtual y visual.