Y aunque parezca un chiste, es más triste de lo que parece…
Vía | El Ventanuco
Y aunque parezca un chiste, es más triste de lo que parece…
Vía | El Ventanuco
El próximo viernes se decide la ciudad organizadora de los JJ. OO. de 2016. Río, Tokyo y la capital de España pugnarán por ver quien verá a Usain Bolt ganar sus próximas medallas de oro olímpicas.
Anticipándose a cualquier contingencia negativa y según ha podido saber Chiquiworld, el pleno del Ayuntamiento ha decidido que si el mes que viene no consigue que Madrid albergue los próximos Juegos Olímpicos de 2016, se presentará un poco más adelante, en el bicentenario, en 2216.
El alcalde ha declarado: «Teniendo rigor cumpliendo los plazos, seguro que en los próximos 200 años nos da tiempo a dejarlo todo terminado. Si acaso podría faltar alguna obra por rematar pero, vamos, sería menor»
Pero hete aquí que éramos pocos y parió la comadrona. Para esa fecha ya tenemos rivales. Como se puede apreciar en la fotografía, Puerto Príncipe ha comenzado a andar. La competencia será dura y como no empecemos a prepararnos ya…
Vía | Palomallaneza
Domingo. Día de fútbol. Los alrededores del Bernabéu sembrado de discos negros y amarillos. Normalmente, se trata de publicidad de alguno de los bares de alterne de la zona con un vale para invitarte a la primera copa.
Pero esta vez es diferente, un logotipo conocido me llama la atención. Al mirarlo veo un moderno y práctico calendario de los partidos de liga del Real Madrid de esta temporada en formato circular. Es una gentileza de lainformación. Una versión muy 1.5 de esos antiguos libritos de bolsillo que se repartían en bares y cafeterías para fidelizar clientes.
Curiosa paradoja. Mientras los medios tradicionales aprovechan el universo online para hacerse publicidad, los medios online prefieren acciones tradicionales para dar a conocer su marca.
Viñeta de El Roto para El País del 31 de enero de 2009.
The New York Times. 12 de septiembre de 2001.
Portadas de diarios de papel que por su trascendencia informativa o visual merecen ser recordados.
Para muchos de nosotros supuso la primera ración de libertad que nos concedían nuestros padres y el preludio de las que llegarían después.
Según la liturgia, el sábado por la mañana era el momento adecuado para ir donde estaba tu madre y hacer la petición de rigor:
«Mamá, ¿Me das la paga?» A lo que ella respondía inexorablemente: «Pídesela a tu padre».
Volvías al salón, donde tu padre leía el Marca, y repetías:
«Papá, ¿Me das la paga?» A lo que siempre respondía con un «Pídesela a tu madre», tú le rebatías: «Ya se la he pedido. Me ha dicho que te la pida a ti» Contestaba yo con voz de pena. Al final, tu padre te la daba haciéndote más feliz que una perdiz.
El importe variaba en función de la edad y de las dotes negociadoras de la contendientes al instituirse el canon en cuestión. Oscilaba entre los cinco durillos de los más jóvenes, hasta las 150/200 pelas de los más curtidos. Yo creo que llegué a andar por las 175 pelas.
Una vez cobrada, lo primero era bajar a la calle, llamar a los telefonillos de casa de tus amigos y a la pregunta de: ¿Bajas? juntarse todos en la calle para ver como distribuir la paga en bonys, palulú y máquinas de bolas.
Y todo ese reparto se hacía sin la tutela paterna, ya que aunque parezca increible, antes había barrios donde los niños salían a jugar solos a la calle.
Una vez fundida (todo en el mismo día), te quedabas tieso el resto de semana esperando que la caridad materna se apiadara de ti, pero daba igual, el sábado (domingo en algunos casos) siempre era el mejor día.
Ahora, desgraciadamente, este «subsidio» tiende a desaparecer, imponiéndose la fórmula del «todo incluido» del tipo: «No me dan paga, me dan cuando lo necesito…» Vamos, que como el niño sea un poco listo, les saca hasta los higadillos
Tiempos aquellos…
Vistas desde los solicitadísimos Palco VIP. He ido a verlo con Paranoias.
El barrio bonaerense de San Telmo ya tiene un recuerdo para su convecina más universal. Cuando vaya a Buenos Aires será uno de mis sitios de peregrinación.
¡Atención, recién licenciados en periodismo! Para todos aquellos que lleven un tiempo buscando curro y no consiguen nada, he encontrado el trabajo perfecto. Poco trabajo, actos sociales por la cara y una visibilidad mediática importante.
Eso sí, es necesario dejar los escrúpulos en casa antes de presentarse a la entrevista y tener unas tragaderas más grandes que la puerta de Brandemburgo.
Se trata de ser portavoz de famoso. O lo que es lo mismo, hablar por boca de él cuando las cosas vayan mal (o necesite pasta) y hacerle las exclusivas cuando la cosa vaya bien (o también necesite pasta). Que esta gente no sólo se va a alimentar del aire… ¿no? Este oficio ya lo desempeñan profesionales «enormemente» prestigiosos como Carmen Pardo, Chelo García Cortés, ex-mujer de Parada y un sinfín de nombres más…
Al principio, no se paga mucho (o sea, nada), pero luego en cuanto vayas a cualquier Sálvame, Sálvame Deluxe o la madre que parió a Sálvame y le pongas un poco de morbo con cualquier mentira, tienes jugosos ingresos asegurados durante un buen rato. Además, vale todo, ¿Qué te equivocas? Te desmientes a ti mismo y ya está, arreglado. Nadie te pasará factura.
No es necesaria ni experiencia, ni capacitación profesional, ni ná de ná. Tan solo un poco de conocimiento de famosos, famosetes y parásitos varios y morro, mucho morro.
El famoso a representar es lo de menos. Con que te lo curres y lo pongas en el «candelabro» visceral en el menor tiempo posible habrás cumplido. Serás compañero de trabajo de profesionales tan cualificados y prestigiosos como Mila Ximénez, Lydia Lozano, Belén Esteban o Pipi Estrada. Con un poco de suerte, Jorge Javier Vázquez te hará colaborador fijo de su programa y de ahí a la eternidad. En los temas que no afecten a tu representado podrás expresarte con toda la libertad del mundo, halagando o buscando el lío, vamos, a gusto del consumidor.
¿Os imaginais a Carlos E. Cue poniéndole crema en al espalda a Rajoy o a Jesús Alcaide yéndose de copas hasta las 6 de la mañana con C. Ronaldo…? Pues eso es lo que hacen alguno de éstos y luego van de paladines de la credibilidad y la honestidad.
Así que, ya sabéis, los interesados llamad al teléfono que aparece en pantalla o manda portavoz espacio tu nombre al 6655. Abstenerse agencias.
Un grupo de diseñadores norteamericanos se han propuesto cambiar uno de los iconos modernos de la actual sociedad de consumo: el dólar estadounidense.
El célebre dólar no ha sido realmente rediseñado desde los años 30 (aunque hay que recordar que a principios de siglo se hicieron pequeños retoques a los billetes). El «Dollar ReDe$ign Project» (como así se llama la iniciativa) propone terminar con esta situación
Alegan que si sus colegas suizos han podido hacerlo, porque no van a poder hacerlo ellos. Dicen también que su «buck» está realmente desfasado si se le compara con «su gran rival», el Euro, al que se le ve más moderno y acorde con los tiempos que corren.
La mayoría de los participantes se lo han tomado con humor y dentro de las múltiples ideas que se han enviado hay alguna realmente descabellada…
Seguramente, esta iniciativa acabará en nada, pero nunca se sabe…
Página oficial | Dollar ReDe$ign Project