A todos aquellos que les gusten las viñetas de Forges, El Roto, Romeu, Máximo o Peridis que se publican en El País, ahora también las podrán seguir a través de su agregador de feeds favorito. Basta con añadir esta dirección y los podrán ver todos reunidos.
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Me entero por la excelente bitácora de Sebastián, compañero en LasIdeas, de la oferta que ha lanzado LAB, la compañía aérea de bandera boliviana, para todos aquellos que estén pensando venirse a España a buscar una vida mejor.
La irrechazable oferta consiste en que si al viajero boliviano que vuela con esta compañía se le rechaza la entrada a su llegada a España, esta aerolínea le devuelve el 50% del billete.
Un billete de estas características a Madrid cuesta actualmente en la web de LAB unos 1300 dólares más impuestos. A esta cantidad hay que sumar los dólares necesarios para poder pasar los primeros días a la llegada. Sumando todos los conceptos, se podría disponer de plata suficiente para emprender un negocio allí e intentar salir adelante sin desarraigarte ni separarte de los tuyos. (Sebastián también me cuenta el diario drama humano que se produce en el aeropuerto antes de embarcar).
Desestructurar socialmente el país con el fin de capitalizarlo económicamente es una estrategia funesta para el bienestar y crecimiento de una sociedad. Se emigra porque no hay más remedio, y este tipo de campañas es jugar mezquinamente con la necesidad de la gente.
Por cierto, la devolución de la mitad del billete no es en dinero constante y sonante. El asterisco que acompaña al mensaje principal dice: “Devolución del valor neto de su dinero en pasajes a cualquier destino del Lloyd”. Realmente solidario…
Triunfo fue una revista de actualidad que desde principios de los 60 hasta mediados de 1982 se podía encontrar en los quioscos españoles. Concebida en principio como una publicación cinematográfica, fue derivando hacia la información general y más tarde a la política. Por sus páginas pasaron firmas ilustres como Luis Carandell, Eduardo Haro Tecglen, Manuel Vázquez Montalbán…
Ahora reaparece, casi 25 años después, en versión digital poniendo a disposición de los interesados sus veinte años de historia. Una excepcional mirada a la historia cotidiana de aquella época para perderse horas y horas…
El próximo lunes 20, el hasta ahora elpais.es dejará de serlo para convertirse en elpais.com. El nuevo formato de este periódico digital abandona los 780 píxeles de su maqueta actual para adaptarse a las tendencias actuales. Mucha multimedia, mucho más espacio para la participación, bitácoras que entran, otras que salen…
Por otro lado, la versión para suscriptores, que a partir de ahora se llamará ELPAISPlus dispondrá de servicios añadidos como la edición impresa, toda la hemeroteca del diario desde 1976, suplementos en PDF, publicidad restringida, acceso completo a LeMonde.fr, emisión en alta calidad de las radios del Grupo Prisa, CNN+ en directo y en alta calidad, los teletipos de EFE en tiempo real…
El CSI de Miami está buscando personal para unirlo a Horatio y compañía. Los requisitos que hay que cumplir son bastante exigentes, pero por contra se trata de un empleo seguro (hasta que cancelen la serie) y con posibilidades de recolocación a la vuelta a casa (El comisario, Los hombres de Paco…)
Por un lado, están las obligaciones que son las siguientes:
Siempre tienes que explicar a tu compañero lo obvio.
Si entras en un escenario de 1.000 metros cuadrados, tendrás que encontrar el pelo o fibra fundamental para resolver el caso antes de que se acabe la escena.
Puedes entrar en la escena del crimen con los zapatos llenos de barro hasta las rodillas, pero que no se te olvide ponerte guantes.
Tienes que dominar hasta el más mínimo detalle todas las ciencias acabadas en -gía: entomología, geología… además de algunas otras como balística o derecho.
Aprenderse que en caso de que el asesino venga de otro estado, sólo podrá proceder de Nueva York o Las Vegas.
Habrás de usar gafas de sol y sólo quitártelas cuando vayas a decir algo profundo.
En tu puesto de trabajo, además de ser más de diseño que las corbatas de Carrascal:
Dispondrás de ordenadores superpotentes que de una foto de carné te saca hasta al ADN.
Tendrás acceso a las bases de datos más importantes e inútiles del mundo (ruedas de coche, pinturas acrílicas o suelas de zapato)
Por si esto fuera poco, aprenderás cientos de cosas sobre esta bonita ciudad de Florida, entre ellas que:
Miami es el lugar del mundo con mayor número de fiestas por metro cuadrado. Además, todas las chicas están recauchutadas, son monísimas y vuelven solas a casa.
En esta ciudad sólo hay rascacielos de diseño y mares de aguas cristalinas. Pisos y barriadas populares para Chicago o Detroit.
Casi es imposible que llueva, y cuando lo hace, no moja.
Ah, por cierto, sólo se trabaja los lunes por la noche
Pues eso, si te animas, ya sabes… y a los que ya hayan pasado las pruebas, que informen si piden algún requisito más…
Últimamente, por no decir desde hace demasiado tiempo, las campañas de promoción propia que se hacen los periódicos se limita a informar de sus últimas lanzamientos comerciales. Que si abogados en El País, el NO-DO en El Mundo, vajillas de porcelana en ABC o partidos de tenis en DVD en Marca. Además, la lucha contra otros periódicos, la televisión e internet hacen más agresivos si cabe este tipo de autobombos.
Desgraciadamente, ya no se intentan vender periódicos por su contenido, y sí por todo aquello que le acompaña. La esencia del negocio, que no es otro que intermediar transmitiendo noticias veraces y opiniones de calidad, parece no ser atractiva como reclamo publicitario.
Por contra y al otro lado del charco, el diario estadounidense The New York Times ha lanzado una campaña multisoporte (radio, TV e internet) denominada These times demand The Times (Estos tiempos exigen The Times), en la que vuelve a las raíces y reivindica la buena información como valor esencial de su periódico.
Apoyándose en algunos de los redactores más destacados de la casa, se muestra el trabajo que hay detrás cada noticia, le ponen cara a la firma que aparece en el papel e intentan dar valor por si mismo a lo que cada día sale de las rotativas.