¡Hola a todos! Cómo habréis notado, y si no ya os lo digo yo, llevo mucho, mucho tiempo sin escribir en esta humilde bitácora. Mis queridos amigos Rosa y Moeh junto a mi inseparable Tormento se han encargado de mantenerla con vida todo este tiempo que yo no he estado.
La razón: la vida, que es más sabia de lo que parece a simple vista, me ha dado un toque, porque ni se puede considerar colleja y me ha mandado una señal en forma de ictus (lo que viene siendo un infarto cerebral de toda la vida), pero muy, muy leve. De esos que sólo te queda dar gracias al que esté por arriba y que te permiten volver a ser la persona que eras en muy poco tiempo echándole un poco de constancia y ganas de seguir adelante.
El caso es que tras un tiempo (poco) en el hospital y haciendo todavía mucha rehabilitación ya estoy de nuevo de vuelta y con ganas de vivir la vida que es lo que importa. Aunque ahora escriba en esta bitácora con dos dedos ya lo haré más rápido en el futuro. Lo importante es empezar
Por último, y si me permitís un consejo de alguien que le ha visto las orejas al lobo muy, muy de cerca: salid, respirad, follad todo lo que podáis (si podéis), tomaros todas las cañas offline que podáis con los amigos, disfrutar de la vida y en definitiva haced feliz y preocuparos por la persona que os acompaña en el camino que es lo verdaderamente importante. Lo demás es simplemente dinero y supervivencia.
No sabéis cuanto me alegra poder estar aquí de nuevo con vosotros. Miles de abrazos y besos para todos y bienhallados, amigos…
9 de julio de 2009 a las 22:14
Hola Chiqui!
Es la primera noticia que tengo y me he sorprendido. Sólo decirte que me alegro mucho de tu recuperación y que gracias por el mensaje tan inspirador. Fuerza y ánimo.
Un abrazo.
13 de julio de 2009 a las 3:27
No he comentado nunca pero te leo en la sombra, eso sí, con retraso. Vaya susto, me alegro de que ya estés recuperándote y sobre todo con ánimo y buen humor.
Un abrazo.
13 de julio de 2009 a las 9:54
Hola Chiqui, curioseando por la red me encuentro esta página tuya que no tenía idea que existía, y para colmo me entero de lo ocurrido. Ya sabemos que hace mucho que no hablamos, cosas o causas de la vida, pero sabes que tienes mi cariño.
Me alegra tu recuperación y mucho ánimo.
Mar
13 de julio de 2009 a las 11:42
Ánimo compañero. Y me alegra leerte de nuevo por aquí.
Un abrazo gigante!
15 de julio de 2009 a las 23:46
Qué alegría volver a leerte por aquí!! No nos vuelvas a dar un susto así ¿eh? 😉 Recupérate del todo lo antes posible, que es lo importante. Un abrazo muy grande!!
16 de julio de 2009 a las 17:25
[…] Esta es la historia de Chiqui. […]
16 de julio de 2009 a las 17:47
Mucho ánimo desde aquí 🙂
17 de julio de 2009 a las 13:10
¡¡enhorabuena por haberlo superado!!
bicos,
18 de julio de 2009 a las 2:49
No nos conocemos personalmente, pero igual te considero un buen amigo. A por una pronta recuperación y mucho ánimo!
20 de julio de 2009 a las 11:03
Me ha asustado tanto lo que te ha pasado como me ha alegrado el que estés bien. Yo te conozco personalmetne, cuando fui con mi facultad a visitar el país y sigo tu blog desde entonces, ay que tú mismo em diste la dirección. Chiqui, TE PROMETO QUE VOY A DISFRUTAR DE LA VIDA.Cuidate
21 de julio de 2009 a las 17:31
[…] mis queridas amigas Rosa y Mábel que desde que me ha dado el “vahido” me he desinhibido y ahora no me corto ni un pelo en soltar por esta boquita todo lo que se me viene […]
21 de julio de 2009 a las 21:33
Me acabo de enterar y descuida Chiqui, que te haremos caso 🙂
Un abrazo fuerte
21 de julio de 2009 a las 21:38
Chiqui… me acabo de enterar.
Cuídate mucho! Lo bueno es volver a verte escribiendo por aquí. 🙂
21 de julio de 2009 a las 22:21
Pues me alegra saber que estás genial y con ganas de que te hagamos caso
eso haremos
cuidate
un abrazo
23 de julio de 2009 a las 7:11
Chiqui,
Yo también me acabo de enterar ahora por el nuevo post que has escrito (no sé cómo se me pasó ese primero).
Quiero que sepas que me alegro mucho de que la cosa haya quedado sólo en eso y que estés como nuevo.
Un abrazo y a ver si coincidimos pronto de nuevo.
24 de julio de 2009 a las 0:54
Felicidades por tu felicidad. Comprendo que se vea todo de manera diferente después de una experienca xomo la tuya. A un querido amigo mío le fue peor: ahora lucha por aprender a caminar, a hablar, a vivir.
¡Enhorabuena!
25 de julio de 2009 a las 12:34
leyendo tu entrada me he emocionado.
me alegro de haber encontrado tu blog.
voy a publicar, con tu permiso, esto en mi web. gracias por existir.
28 de julio de 2009 a las 8:33
Aquí sigues, y aquí te seguiremos queriendo. Y aprendiendo de tus experiencias.
29 de julio de 2009 a las 15:01
Bienvenido de vuelta, Chiqui. Estoy seguro que con dos dedos eres capaz de hacer mucho más de lo que yo conseguiré nunca con 10.
Un enorme abrazo y gracias por tus palabras.
29 de julio de 2009 a las 19:12
Te he descubierto porque de ti hace mención la mala de la película y aún sin conocerte y sin saber nada más que lo que acabo de leer, me alegro. Me alegro que hayas salido del hospital y estés cogiendo fuerzas. Que vayas acelarando a tope, que ya no hay más cuestas abajo. Mucho ánimo y un abrazo y por cierto, me quedo con una frase tuya que es para enmarcar: lo demás es dinero y supervivencia. Chapó!! A seguir dando caña. XD
6 de agosto de 2009 a las 14:25
Varios minutos después de leer tu post sigo con los pelos de punta.
Gracias por traer un soplo de vida a este mundo de bits y bytes.
Un abrazo muy fuerte
11 de agosto de 2009 a las 22:45
Jelou Chiqui, he tenido el placer de conocerte en Palma en la Copa del Rey, y bien digo , un placer. Después de leer tu post, no puedo estar más de acuerdo contigo, te han dado un toquecín pero lo cuentas, asi que A VIVIR QUE SON DOS DÍAS.. Cuidate, date tus homenajes (siempre con la supervisión del alto mando je, je).
Me encantó saber que tenemos amigas comunes de allá por el pleistoceno y de éste lugar tan estupendo, La Navata.
Un besote. Vivi
14 de agosto de 2009 a las 12:03
Hola Chiqui! me acabo de enterar leyendo este post. te envío un fuerte abrazo. Aúpa!
31 de agosto de 2009 a las 11:37
[…] año la verdad es que no he tenido mucho tiempo (motivos personales lo llaman) y no he podido hacer ningún descubrimiento. Lo que sí he hecho ha sido fortalecer las […]
19 de enero de 2014 a las 18:08
[…] Circunstancias de la vida hicieron que nuestra relación se distanciara (que no enfriara) y de vernos todos los días pasamos a juntarnos un par de veces o tres por semana. Además de los susodichos avatares vitales, también influyó algún cambio profesional (dentro de la misma empresa) que no me dejaba mucho tiempo para dedicarlo a otra cosa que no fuera el trabajo. […]