Era muy sencillo saber cuantos españoles había en la sala de cine belga viendo “Qué he hecho yo para merecer esto”: nos reíamos con 30 segundos de antelación. He de confesar que nunca dejó de sorprenderme como alguien que leía a Almodóvar en versión francés/flamenco (las películas en Bélgica llevan doble subtítulo) se tronchaba con una Chus Lampreave en pleno “Te dejo que me está haciendo efecto el laxante…” (antes de que venga algún purista, que conste que esta frase no es de “Qué he hecho….”).
Sigo a Almodóvar con la misma pasión/resignación que a Woody Allen: me impongo la obligación de ver sus películas por si acaso. Después de “La mala educación” tuve que juramentarme por los niños que no tengo que volvería a Almodóvar a pesar de semejante tostón. Y volví y ví “Volver”. Os atormentaré hasta que vayáis a verla, es espléndida. Los diálogos medidos, los besos de abuela de esos sonoros con rechupeteo de cara, los floripondios de los estampados por doquier, las actrices contenidas y emotivas, el tempo perfecto y una trama previsible desde el principio pero que no importa nada porque es una excusa de la que colgar las vidas de todas, protagonistas y secundarias.
Esta vez, como estaba en España, los asistentes sincronizamos nuestras risas y nos quedamos en la sala hasta que salió el último título de crédito. Atención a las “Asesoras en Asuntos Manchegos”.
VOLVER | España. 2006. Director: Pedro Almodóvar. Reparto: Penélope Cruz, Carmen Maura, Chus Lampreave, Lola Dueñas, Blanca Portillo
17 de mayo de 2006 a las 13:41
[…] Volver. Y bueno… he de decir que no soy de los incondicionales de Almodovar y que me gustaba más el director fresco y atrevido de sus primeras cintas que el cineasta ‘de culto’ en que se ha convertido ahora. No obstante fui a verla con esperanza después de las buenas críticas en general y de Tormento en particular (se que no tiene buen gusto para los hombres pero me han dicho que lo del cine si le da bien) y me encontré con una película bastante aceptable aunque no tan “manchega” como me esperaba. La interpretación de Penélope Cruz es tan absolutamente lamentable como nos tiene acostumbrados (el playback cantando flamenco es de verguenza ajena) y Carmen Maura, por el contrario, se presenta capaz de sacar a flote la película ella solita si hace falta. […]